viernes, 20 de enero de 2012

"Atención vegetarianos comer frutas y verduras no adelgaza"

Los amantes de las frutas y las verduras no son inmunes al sobrepeso
El equipo analizó la dieta y el peso de adultos de entre 25 y 70 años.

Reuters

NUEVA YORK (Reuters Health) - Un estudio de Europa reveló que comer gran cantidad de frutas y verduras no sería suficiente para prevenir el sobrepeso que llega con los años, salvo en las personas que acaban de dejar de fumar.

Los autores hallaron que, entre 374.000 adultos de 10 países europeos controlados durante cinco años, los que más frutas y verduras consumían no eran menos propensos a engordar tras considerar otros factores, como las calorías consumidas y el ejercicio.

Aun así, los resultados publicados en American Journal of Clinical Nutrition no son una excusa para no comer frutas y verduras, que aportan nutrientes que protegen de enfermedades crónicas, como las cardiopatías y algunos cánceres, explica el equipo de Anne-Claire Vergnaud, del Imperial College de Londres.

El equipo analizó la dieta y el peso de adultos de entre 25 y 70 años. En cinco años, los participantes engordaron en promedio unos 500 gramos por año.

En los hombres, ese sobrepeso disminuía cuantas más frutas y verduras consumían. Pero la relación desapareció al considerar otros factores, como las calorías diarias consumidas, el ejercicio y el nivel educativo.

En las mujeres, las que más verduras consumían fueron las que más engordaron en los cinco años.

Esto, para los autores, podría atribuirse a que esas participantes estaban haciendo dietas para adelgazar que promueven un alto consumo de verduras. Muchas personas que hacen dietas especiales sufren un efecto "yo-yo" en el tiempo.

Hubo un grupo en el que el alto consumo de frutas y verduras estuvo asociado con un menor aumento de peso: los que dejaron de fumar durante el estudio. La hipótesis del equipo sería que los hábitos alimentarios saludables podrían prevenir el sobrepeso que aparece en muchos fumadores cuando abandonan la adicción.

Si eso es así, el equipo escribe que "este hallazgo tendría consecuencias importantes para la salud pública porque el aumento de peso al dejar de fumar es una causa de recaída".

En general, los expertos recomiendan consumir frutas y verduras para cuidar la salud. La dieta DASH recomendada para bajar la presión y el colesterol incluye cuatro o cinco porciones diarias de frutas y verduras (una porción equivale a media taza de vegetales cocidos o una fruta mediana).

Algunos estudios sugieren que el adulto promedio de Estados Unidos consume sólo dos o tres porciones diarias de frutas y verduras combinadas.

FUENTE: American Journal of Clinical Nutrition, online 14 de diciembre del 2011


martes, 27 de diciembre de 2011

"Como paso las fiestas sin aumentar de peso"

Es más difícil quemar 3500 calorías que comerlas
Cómo sobrevivir a los banquetes de las fiestas de fin de año
Pensar y planificar un poco ahora podría evitar que tenga que hacer dieta luego.

Medlineplus

Muchas personas no piensan sobre lo que comen durante las fiestas de fin de año hasta Enero, cuando ven con tristeza las cifras que arroja la báscula y salen corriendo al gimnasio, se unen a Weight Watchers o compran el último libro con la dieta de moda.

No tiene que ser así.

Los expertos en salud afirman que uno puede disfrutar de las fiestas de fin de año, y de las comidas especiales, sin comer en exceso ni aumentar de peso.

"No hay nada de malo con complacerse, pero no significa que haya que aumentar de peso", señaló Karen Ansel, dietista registrada con sede en Nueva York y vocera de la Asociación Americana de Dietética (American Dietetic Association, ADA). "No es la época para intentar perder peso. Se intenta mantener el estatus quo. Pero hay distintos grados de indulgencia".

Jessica Crandall, dietista registrada de Denver que también es vocera de la ADA, añadió que aumentar de peso en las fiestas de fin de año y luego trabajar arduamente para perderlo de nuevo no es bueno para el cuerpo de una persona. Las llamadas dietas "yo-yo" pueden destrozar el metabolismo de una persona, y hacer que pierda masa muscular.

"Esencialmente el organismo se ralentiza, lo que dificulta que se pierda peso a largo plazo", explicó Crandall. "Y tenga en cuenta que es mucho más difícil quemar 3,500 calorías, la cantidad que hay en una libra, que comerse 3,500 calorías".

En primer lugar, las personas interesadas en mantener el peso durante las fiestas de fin de año deben seguir un horario regular de comidas, señalaron las dos dietistas. La investigación ha demostrado que las personas que se saltan comidas, sobre todo el desayuno, terminan comiendo más durante todo el día.

"Intente mantener horarios constantes para la comida, para evitar tener demasiada hambre", aconsejó Crandall. "Cuando uno está demasiado hambriento, puede tomar malas decisiones sobre lo que come. No se mate de hambre durante el día esperando esa fiesta de la noche, porque entonces se dará un atracón o comerá en exceso".

Ansel sugiere que uno piense ahora sobre los alimentos que realmente disfruta y planifique enfocarse en ellos al mismo tiempo que come menos de la comida común.

"Piense sobre los favoritos que desea, y separe las cosas que solo se comen en las fiestas de fin de año de las que se pueden comer en cualquier momento", planteó. "¿Le encantan las galletas de Navidad? Pues cómase algunas, pero no se coma un brownie, porque eso lo puede comer en cualquier momento".

También hay un par de motivos para tener cuidado con la ingesta de alcohol. Las bebidas alcohólicas, sobre todo las que son sofisticadas y propias de la época, tienden a tener muchas calorías. "Por lo general, lo que se añade a la bebida es lo que contiene las calorías", señaló Crandall.

Además, si uno está borracho, puede olvidarse de lo que come. "Reduce totalmente las inhibiciones, y uno comienza a comer cosas que nunca hubiera comido" si estuviera sobrio, explicó Ansel.

Crandall y Ansel sugirieron otros consejos para comer en las fiestas de fin de año, que incluyen:

Coma muchas verduras, y cómaselas primero antes de pasar a la otra comida del plato.

Tenga en cuenta que muchas cosas adicionales, como el queso o la salsa de arándanos, están llenas de calorías. "Si no son sus favoritos, no los ponga en el plato", dijo Crandall.

Si su comida favorita tiene muchas calorías, asegúrese de minimizar la porción. "Dos bocados calman el deseo", aseguró Crandall. "Después de eso, en realidad solo está alimentando sus viejos hábitos. En realidad no le da ninguna nutrición, y ya no está satisfaciendo ese deseo intenso".

Mantenga las porciones pequeñas. Recuerde que una porción de carne debe ser del tamaño de un teléfono celular o una baraja, apuntó Crandall. Una porción de carbohidratos, como el puré de papas o el pan, debe ser más o menos del tamaño de su puño.

Tras una gran comida festiva, no se deje caer en un sillón o el sofá. Salga a caminar o participe en alguna actividad que ayude a quemar algunas de las calorías que acaba de ingerir.

Un consejo final: prepárese para rechazar ofertas de comida, sobre todo de sus seres queridos que tienden a usar la culpa para que uno coma más.

"No se debe comer por cortesía", enfatizó Ansel. "Hay muchas otras formas de mostrar amor y gratitud aparte de comer cuando no se tiene hambre".

FUENTES: Karen Ansel, R.D., Long Island, N.Y.; Jessica Crandall, R.D., Denver.


martes, 20 de diciembre de 2011

"Las mejores recetas navideñas"



Arequipe de Reyes
Bebida láctea navideña típica de Venezuela
Arroz con gandules
El arroz con gandules es una combinación de arroz, gandules y cerdo cocinados en la misma olla con un sofrito al estilo puertorriqueño. Es el plato insignia de la gastronomía de Puerto Rico.
Canelones de Brandada
La brandada de bacalao es un plato típico de invierno en la costa mediterránea, aquí la encontrarás en forma de canelones acompañados de una estupenda mousse de escalibada
Cardo de Navidad
Un primer plato ligero ideal para estas fiestas de excesos, puedes añadirle almendras o piñones para darle un toque especial.
Carlota navideña
Un delicioso postre de bizcocho, almendras y nata sencillo de preparar. Combina con cualquier menú de Navidad y se presta a diversas presentaciones.
Castañas pilongas
Una forma distinta de preparar las castañas estas navidades: cocidas en un dulce caldo de canela y anís.
Compota navideña
Para que no falten esas 5 piezas de fruta al día por Navidad, aquí tienes una exquisita compota
Ensalada de Navidad
Dale un toque colorido a la mesa estas navidades con una ensalada de escarola y granada, ideal para acompañar los platos de carne o pescado principales.
Ensalada navideña
Esta completa ensalada bien puede valer de primer plato gracias a que incluye pollo, manzana, huevo y nueces.
Huevos escondidos
Una sencilla receta ideal como entrante en comidas y cenas navideñas
Langostinos al cava
Sencilla y rápida receta para preparar los langostinos con un toque de cava
Lomito al vino con hongos
Un nutritivo plato de lomo al vino con champiñones
Mazapán (Pan dulce)
Un dulce clásico de almendra que no puede faltar ninguna Navidad. Esta receta no es de figuritas de mazapán sino de pan dulce, que tiene apariencia de bizcocho e incluye pasas y frutas escarchadas en su interior.
Naranjas rellenas
Fáciles de preparar, este ligero y sencillo postre de naranja donde la propia cáscara sirve de envase sorprenderá a tus invitados.
Pan de jamón
Un sencillo rollito de jamón con pasas que puedes cortar en rodajas y te resolverá esos momentos en los que servir algo de picar a tus invitados
Pollo en Pepitoria
Un delicioso plato de autor para estas navidades, publicado en esta web por cortesía de Don Gonzalo Sol de Liaño, miembro de la Academia Española de Gastronomía.
Quindim (postre brasileño)
Un delicioso postre de yema típico de Brasil
Rollo de Navidad
Un rollo relleno de cerezas, ciruelas y marshmallows (masmelos, nubes, etc.) perfecto como postre o como aperitivo dulce
Roscón de Reyes
El bizcocho con sorpresa tradicional en las navidades españolas para desayunar el día 6 de enero, día de Reyes, acompañado de una buena taza de chocolate. Puedes presentarlo sin rellenar o relleno de nata, chocolate, crema...
 
Tarta de nata
Una sencilla tarta de nata y galletas, también puedes adornarla con fresas o como más te guste.
Tragos chilenos
En Chile se celebra la Navidad y el Año Nuevo con diferentes tragos o bebidas como son El Cola de Mono, La cazuela de Champaña o ponche a la Romana

martes, 22 de noviembre de 2011

"Tres de cada diez chicos y uno de cada dos adultos son obesos "

En la dieta hay un exceso de calorías de "mala calidad"
Calorías de baja calidad nutricional (que llaman "dispensables"), como azúcares agregados y grasas saturadas.

La Nación

Por Nora Bär

Una radiografía inquietantemente reveladora de cientos de alimentos que integran la dieta de los argentinos ayuda a explicar por qué tres de cada diez chicos y uno de cada dos adultos que viven en este país padecen sobrepeso u obesidad.

Según el estudio que hoy presentarán los licenciados Sergio Britos, Agustina Saraví y Nuria Chichizola en las Jornadas de la Asociación Argentina de Nutricionistas, ingerimos más del doble de lo recomendado de calorías de baja calidad nutricional (que llaman "dispensables"), como azúcares agregados y grasas saturadas.

Se considera que una dieta saludable no debería incluir más de entre 10 y 17%; es decir que de 2000 calorías diarias, alrededor de 340 podrían ser dispensables. Sin embargo, el detallado análisis de cinco estudios locales (entre ellos, la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud, y otro realizado este año en más de 700 escolares bonaerenses) arroja una cifra que oscila entre el 35 y el 40%.

"El concepto de «calorías dispensables», introducido en las guías norteamericanas de nutrición en 2005, alude al exceso de calorías de un alimento comparado con un producto equivalente, de su mismo grupo, pero de alta densidad de nutrientes -explica Britos-. Sabemos que las gaseosas, los dulces y el azúcar tienen calorías no nutritivas, pero también las aportan alimentos muy característicos de nuestros patrones de consumo, como la factura y los cortes de carne con mucha grasa. Por ejemplo, los bizcochitos de grasa, cada 100 g tienen 50 calorías no nutritivas. Un vaso de gaseosa no light tiene 80, más del 20% de la recomendación. En un helado de crema de 100 g, que tiene 305 calorías, 160 son dispensables. Y en la porción habitual de 200 g de carne no magra, hay 100."

Para llegar a esta conclusión, los investigadores del Programa de Agronegocios y Alimentos de la Facultad de Agronomía y de la Escuela de Nutrición, ambos de la UBA, y de la Carrera de Nutrición de la Universidad de Belgrano debieron trazar el perfil nutricional de más de 400 alimentos.

"Una de las cosas que nos llamaron la atención es que estas calorías de baja calidad no provienen solamente de las gaseosas o los jugos azucarados, sino también de alimentos como la carne que nos gusta a los argentinos, el yogur saborizado y el queso con mucha grasa."

Al contrario de lo que frecuentemente se piensa, estas calorías dispensables deberían ocupar el mismo espacio en todas las edades. "Los más chicos (menores de dos o tres años) y las mujeres embarazadas o por embarazarse son los grupos más vulnerables por sus requerimientos nutricionales -explica Britos-. En esas edades es aún más crítica la concentración de nutrientes en relación con la calidad total de calorías de la dieta. Por ejemplo, para los chicos de más de dos años, toda la grasa de la leche es dispensable."

Según los investigadores, las encuestas analizadas muestran que los nutrientes que claramente deberían limitarse son las grasas saturadas, el sodio y los azúcares agregados. Por el contrario, los que aparecen como deficitarios son el calcio, el hierro y las vitaminas A y C.

"Este trabajo es el primero en la Argentina que cuantifica y caracteriza el aporte de calorías dispensables -dice Britos-. Las categorías de mayor aporte son los azúcares y dulces, y en segundo lugar se ubican bebidas y panificados. Luego vienen las carnes y los lácteos con alto contenido de grasa, y en último lugar, las pastas rellenas."

Aunque aclaran que no se trata de alarmar, sino de ofrecer un marco de referencia para tomar decisiones informadas, los investigadores destacan que, dado que en los últimos años se multiplicó la oferta de alimentos de diversos tipos, es importante diferenciar cuáles tienen nutrientes esenciales y cuáles, componentes que deberíamos limitar.

"La base de una dieta saludable no incluye calorías dispensables -concluye Britos-. Por eso quisimos hacer este aporte, inspirado en los conceptos que dieron origen a la iniciativa Nutrición 10, Hambre 0, en el marco del actual proceso de revisión de las guías alimentarias locales. Sería fundamental fijar como objetivo una disminución de este tipo de calorías a la mitad, haciendo foco en mensajes de moderación en el consumo de bebidas e infusiones azucaradas, en particular en niños. También habría que enfatizar el consumo de las variedades de alimentos de mejor calidad nutricional: leche y yogures no enteros, cortes de carnes magras, panificados con menos del 13% de grasas, preferencia por pastas en sus formas simples, y abundante cantidad de frutas y verduras de todo tipo y color. En cuanto a los aceites, sería bueno ir incorporando algo de los de oliva o canola, además del de girasol, típico de la mesa argentina."


Evaluarán si los alimentos saludables cumplen con lo que prometen

El Ministerio de Salud creo una comisión para determinar si sus publicidades se corresponden con lo que realmente ofrecen.

(Télam).- Una comisión del Ministerio de Salud integrada por profesionales de esa cartera, del Conicet, expertos en nutrición y académicos de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA), evaluará si un alimento tiene las propiedades saludables que publicita, para luego autorizar o no la continuidad de esos anuncios.

La Comisión Evaluadora para la Declaración de Propiedades Saludables de Alimentos fue puesta en vigencia hoy mediante la disposicón 7730 del Boletín Oficial y se encargará de emitir informes sobre los alimentos anunciados como saludables, informó la cartera de Salud en un comunicado.

Integrarán la Comisión profesionales pertenecientes al Instituto Nacional de Alimentos, expertos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), de la Sociedad Argentina de Nutrición y del Departamento de Físico-matemática de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad Nacional de Buenos Aires, entre otros organismos e instituciones.

"Muchas empresas hacen publicidades declarando que sus productos poseen propiedades que hacen bien a la salud de la gente. Ahora, este comité va a definir si realmente ese producto tiene las propiedades aludidas, y si es así las podrá anunciar; y en caso de que no las tenga, no las podrá usar", detalló Roberto Lede, director de Relaciones Institucionales de la Anmat.

El resultado del análisis técnico que realice la ha comisión "podrá ser usado por el Programa de Monitoreo y Fiscalización de Publicidad y Promoción de Productos Sujetos a Vigilancia Sanitaria" de la Anmat, agregó el funcionario.

En la disposición del Boletín Oficial se destaca que las declaraciones de propiedades saludables "ofrecen información que, si se aplica apropiadamente, podría ayudar al consumidor a seleccionar alimentos asociados a una adecuada nutrición y salud, lo que contribuye al logro de los objetivos de promoción de la salud".

Además destaca que "brindar información verídica al consumidor, asistir a los consumidores en realizar elecciones saludables, y/o alentar a los elaboradores a desarrollar productos saludables, son los objetivos que llevaron a establecer las regulaciones de las declaraciones de salud".

Por último, en el artículo 8 se establece que la norma entrará en vigencia a los treinta días hábiles de su publicación en el Boletín Oficial; y que a las empresas se les otorgará un plazo de ciento ochenta días hábiles para su adecuación.

jueves, 17 de noviembre de 2011

"Descubren droga que es efectiva contra la obesidad"

Reuters

Por Julie Steenhuysen

CHICAGO (Reuters) - Un medicamento experimental que bloquea el suministro sanguíneo a las células grasas ayudó a monos obesos a adelgazar, una señal de que podría funcionar en los seres humanos, indicaron investigadores estadounidenses.

El fármaco, conocido como Adipotide, toma un enfoque diferente al de otras medicinas para bajar de peso, que generalmente intentan controlar el apetito, alterar la absorción de grasa o aumentar el metabolismo con el fin de ayudar a las personas a adelgazar.

"El desarrollo de este compuesto para uso humano brindaría una forma no quirúrgica de reducir verdaderamente la grasa blanca acumulada", dijo Renata Pasqualini, del Centro del Cáncer MD Anderson, de la University of Texas, cuyo estudio fue publicado en la revista Science Translational Medicine.

El medicamento funciona buscando y adhiriéndose a proteínas en la superficie de los vasos sanguíneos que alimentan a las grasas blancas, el tipo que se acumula debajo de la piel.

Una vez que se le une, el fármaco emite una molécula sintética que dispara un proceso natural de muerte celular que elimina las células grasas.

Pruebas iniciales del medicamento en ratones obesos mostraron que los ayudaba a perder el 30 por ciento de su peso corporal.

El último estudio incluyó a 15 monos que se habían vuelto obesos casi de la misma forma que lo hacen los humanos, por comer de más y hacer muy poca actividad física.

Diez monos fueron tratados y cinco conformaron el grupo de control. Al final del estudio, los monos que habían recibido tratamiento perdieron en promedio un 38,7 por ciento de su grasa corporal total, comparado con un 14,8 por ciento de los otros animales.

Los monos bajo tratamiento también perdieron un 27 por ciento de su grasa abdominal.

Los efectos colaterales fueron una mayor eliminación de orina y deshidratación leve, ambos síntomas de insuficiencia renal leve. Pero fueron cuestiones reversibles y que variaban según la dosis.

Los investigadores ahora planean probar el fármaco en pacientes obesos que están siendo tratados por cáncer de próstata.

"La obesidad es un factor de riesgo importante para desarrollar cáncer, aproximadamente equivalente al consumo de tabaco, y ambos son potencialmente reversibles", señaló en un comunicado el doctor Wadih Arap, también del Centro MD Anderson, que participó del estudio.

"Los pacientes oncológicos obesos tienen peores resultados en las cirugías (y tratamientos) con radiación o quimioterapia", agregó.

Los pacientes que participarán de la investigación recibirán inyecciones diarias del medicamento durante 28 días consecutivos.

"La pregunta es si su cáncer prostático mejorará si podemos reducir su peso corporal y los riesgos de salud asociados", dijo Arap.

Los laboratorios han tenido dificultades para obtener aprobación en Estados Unidos para comercializar medicamentos nuevos contra la obesidad. Vivus Inc, Arena Pharmaceuticals Inc y Orexigen Therapeutics Inc han sufrido reveses este año debido a preocupaciones referidas a temas de seguridad.

Más de un tercio de los estadounidenses tienen sobrepeso y más de un cuarto son obesos, lo que eleva sus probabilidades de desarrollar problemas de salud como diabetes tipo 2, enfermedad cardíaca, hipertensión, hígado graso y algunos cánceres.



jueves, 10 de noviembre de 2011

"La Sal es buena o mala"


10 NOV 11 | No tendría un impacto positivo generalizado
Revisión cuestiona beneficios de reducir ingesta sal
Los funcionarios deberían revaluar las políticas que aconsejan a todos un menor consumo de sal.

Reuters

Por Kate Kelland

LONDRES (Reuters) - Reducir el consumo de sal en las dietas de la población general no tendría un impacto positivo generalizado sobre la salud, según indica una revisión de más de 160 estudios científicos publicada el miércoles.

En un análisis que reactiva el debate sobre los efectos de la sal sobre la salud, expertos que escribieron en American Journal of Hypertension y la revista de Cochrane Library dijeron que la revisión sistemática sumó pruebas a la creciente evidencia que sugiere que los funcionarios deberían revaluar las políticas que aconsejan a todos un menor consumo de sal.

La revisión -que analizó los resultados de 167 estudios previos- reveló que mientras que disminuir la ingesta de sal reduce la presión sanguínea en las personas con presión normal o alta, también genera aumentos en algunas hormonas y otros compuestos que pueden afectar negativamente la salud cardíaca.

"Realmente no puedo ver, si se observa la evidencia total, que haya alguna razón para creer que hay un beneficio neto de disminuir la ingesta de sal en la población general", dijo a Reuters Niels Graudal, del Hospital Universitario de Copenhague, en Dinamarca, quien dirigió la revisión.

Se sabe que reducir el consumo de sal disminuye la presión sanguínea, pero la investigación aún debe demostrar si eso se traduce en una mejor salud cardíaca general en toda la población.

Pese a ello, muchos países cuentan con guías gubernamentales que piden a las personas reducir su ingesta de sal o sodio por el bien de su salud a largo plazo.

La presión arterial elevada, o hipertensión, es una de las principales causas de accidente cerebrovascular (ACV), ataque cardíaco y otras enfermedades cardiovasculares, que en conjunto son los mayores factores de muerte en todo el mundo, ya que producen más de 17 millones de muertes cada año.

"La pregunta no es sobre si 'deberíamos' reducir la ingesta de sal, sino sobre 'cómo'", dijo Graham MacGregor, profesor de medicina cardiovascular y presidente del grupo Acción Mundial sobre la Sal, quien dijo que está fuertemente en desacuerdo con los hallazgos de Gradual.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ubica a la reducción del consumo de sal entre la lista de las 10 mejores medidas para disminuir las tasas de enfermedad crónica.

Francesco Cappuccio, jefe del Centro para la Nutrición de la Universidad de Warwick, colaborador de la OMS, coincide con MacGregor.

Según Cappuccio, el estudio difundido el miércoles "no debería distraer nuestra atención de la implementación de políticas de reducción del (consumo de) sal a nivel poblacional en todo el mundo, como indican los gobiernos nacionales, la Organización Mundial de la Salud y Naciones Unidas".


¿BENEFICIO NETO?

Pero una serie de estudios que observaron el consumo de sal recientemente sugirieron que la evidencia de base para las políticas poblacionales de reducción de la ingesta de sal no sería tan fuerte como se pensaba inicialmente.

Una revisión anterior de Cochrane Library realizada por investigadores británicos y publicada en julio no halló evidencia de que disminuciones pequeñas en el consumo de sal reduzcan el riesgo de desarrollar enfermedad cardíaca o de morir prematuramente.

Y otra investigación de científicos belgas publicada en mayo indicó que las personas que ingerían mucha sal no eran más propensas a desarrollar hipertensión, y eran además estadísticamente menos proclives a morir por enfermedad cardíaca, que aquellas con bajo consumo de sal.

Graudal dijo que sus resultados muestran que cuando la ingesta de sal es reducida, hay aumentos en ciertas hormonas y grasas conocidas como lípidos "que podrían ser dañinos si persisten en el tiempo".

El experto añadió que dado que ninguno de los estudios en la revisión pudo medir los efectos sobre la salud a largo plazo, su equipo no pudo concluir "si las dietas bajas en sal mejoran o empeoran los resultados sanitarios".

Graudal manifestó que el creciente número de estudios que cuestionan el beneficio neto del menor consumo de sal deberían llevar a los funcionarios de salud pública a revisar sus guías.

MacGregor rebatió la conclusión de Graudal sobre la falta de beneficio neto de la reducción del consumo de sal y dijo que la revisión "claramente muestra una vez más que disminuir la ingesta de sal reduce la presión sanguínea".

Este estudio, contrariamente a lo que señalan sus autores, respalda la enorme evidencia de que reducir el consumo de sal será inmensamente beneficioso para prevenir ACV, ataques cardíacos e insuficiencia cardíaca", indicó en un comunicado enviado a Reuters.


viernes, 4 de noviembre de 2011

"Ser feliz alarga la vida"


 ¿Asociación o causalidad?
¿Podría una vida más feliz ser una vida más larga?
Un estudio muestra una asociación, pero la causalidad no está clara.

Medlineplus
Un estudio británico reciente halla que los adultos mayores que reportan sentirse felices y contentos viven más que los demás.
Pero la investigación no prueba que la felicidad lleve a una vida más larga, y los autores del estudio también hallaron que los niveles altos de emociones negativas, como la ansiedad, no robaban años a las vidas de las personas.
Pero "el estudio apunta a una relación fascinante entre qué tan feliz nos sentimos de un momento a otro y la supervivencia", apuntó el autor del estudio Andrew Steptoe, director de la División de Salud de la Población del Colegio Universitario de Londres.

"Ahora, el desafío es establecer cuáles son los procesos subyacentes, y si podemos aprovecharlos para mejorar la salud de la gente", planteó Steptoe.

Los investigadores creen que la felicidad tiene una conexión con la salud, pero el desafío es averiguar cuáles mecanismos particulares tienen algo que ver. "¿Hace la enfermedad que uno se sienta menos feliz, o protege la felicidad de la enfermedad? Esta investigación se trata de esa segunda posibilidad", dijo Steptoe.

El estudio aparece en la edición en línea del 31 de octubre de la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

Los autores del estudio pidieron a unas 3,850 personas de 52 a 79 años de edad que describieran cómo se sentían (felices, emocionadas, contentas, preocupadas, ansiosas o temerosas) cuatro veces en un periodo de 24 horas. Los voluntarios participaban en un estudio sobre el envejecimiento. La meta de los investigadores era monitorizar lo que se conoce como el "afecto positivo" y el "afecto negativo". Afecto positivo es un término general que se refiere a estados como la felicidad, la paz y la emoción. El afecto negativo es lo contrario, por ejemplo, la ansiedad.

Luego, los investigadores controlaron a los participantes para ver cuántos morían en los próximos cinco años. Más del siete por ciento de los que estaban en el tercio más bajo, o sea los que reportaban la menor cantidad de felicidad, fallecieron. En comparación, apenas 3.6 por ciento de los del tercio superior de felicidad autorreportada murieron.
Incluso después de que los investigadores ajustaron las cifras para que no se vieran afectadas por factores como los ingresos, el sexo, la depresión y la salud, los que dijeron que eran los más felices tenían 35 por ciento menos probabilidades de morir que los que se describieron como los menos felices.
Los ajustes por influencias como la enfermedad y las finanzas significan que el hallazgo del estudio "no se debió a que las personas con un afecto positivo alto fueran más jóvenes, más ricas, tuvieran más educación o una mejor salud en la línea base", explicó Steptoe.
Los investigadores cuestionaron el motivo de que un afecto negativo se relacione con una menor esperanza de vida.

"Un motivo parece ser que sentirse deprimido se relacionaba con tener una enfermedad preexistente", apuntó Steptoe. "Así que cuando tomamos en cuenta la enfermedad en la línea base, las relaciones entre depresión y supervivencia ya no eran significativas".

Los autores del estudio reconocieron que éste tenía varias limitaciones. Por un lado, observó las muertes en general, pero no las causas específicas, como el cáncer. Además, los investigadores solo evaluaron el bienestar en un periodo de 24 horas, y no evaluaron los factores de riesgo individuales, como la obesidad.

Pero aunque el estudio no prueba que la felicidad lleve a una vida más larga, una experta piensa que la moraleja está bastante clara. "La sugerencia abrumadora es que debemos trabajar mucho para potenciar las emociones positivas en nuestras vidas diarias", aseguró Sonja Lyubomirsky, profesora de psicología de la Universidad de California en Riverside, y autora del libro "La ciencia de la felicidad".

FUENTES: Andrew Steptoe, M.A., DPhil., DSc, director, Division of Population Health, and British Heart Foundation Professor of Psychology, Department of Epidemiology and Public Health, University College London, England; Sonja Lyubomirsky, Ph.D., professor, psychology, University of California, Riverside; Oct. 31, 2011, Proceedings of the National Academy of Sciences.


jueves, 3 de noviembre de 2011

"El ejercicio podría vencer a los genes de la obesidad"

| Gen "asociado con la masa grasa y la obesidad"
El ejercicio podría ayudar a superar el 'gen de la obesidad'
Investigadores hallan que el riesgo genético es más bajo entre los que se mantienen físicamente activos.

Medlineplus

Las personas genéticamente predispuestas a la obesidad pueden reducir las probabilidades de acumular peso si se mantienen físicamente activas, sugiere un estudio reciente.

Un gran grupo internacional de investigadores halló que el gen conocido como gen "asociado con la masa grasa y la obesidad" (FTO, por su sigla en inglés), que se sabe aumenta el riesgo de obesidad, tiene un efecto 27 por ciento menos potente sobre los adultos físicamente activos, en comparación con los sedentarios. La conclusión proviene de un metaanálisis de 45 estudios previos que analizaban datos de más de 218,000 participantes.

"Creo que es importante resaltar que no hay que correr la maratón ni apuntarse en el gimnasio. Tan solo sacar al perro, ir al trabajo en bicicleta, subir por las escaleras... alrededor de una hora [de actividad] al día, cinco veces por semana, logrará el efecto que observamos en el estudio", aseguró la autora del estudio Ruth Loos, líder de grupo del Programa de Etiología Genética de la Obesidad del Hospital de Addenbrooke en Cambridge, Inglaterra. "Esperamos que estudios como el nuestro convenzan a las personas de que incluso cuando son genéticamente susceptibles, un estilo de vida saludable ayuda a prevenir el aumento de peso".

El estudio aparece en la edición en línea del 1 de noviembre de la revista PLoS Medicine.

Dos tercios de los estadounidenses tienen sobrepeso o son obesos, así como casi una quinta parte de los niños de hasta 19 años de edad, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. Se sabe que la obesidad aumenta el riesgo de enfermedad cardiaca, diabetes, accidente cerebrovascular y ciertas formas de cáncer.

Loos señaló que investigaciones anteriores de su equipo sobre 20,000 adultos también habían mostrado que la actividad física reducía el efecto del gen FTO sobre el riesgo de la obesidad, pero que estudios posteriores no siempre habían llevado a resultados coherentes.

"Lo que nos sorprendió fue que el efecto [del ejercicio] era más pronunciado en los norteamericanos que en los europeos", comentó. "Especulamos que podría deberse al hecho de que los europeos son 'generalmente' menos obesos y más físicamente activos que los norteamericanos, y que hay un rango más amplio de IMC [índice de masa corporal] y actividad física entre los norteamericanos, de forma que el efecto puede ser mayor".

Algunas de las personas predispuestas al sobrepeso podrían sentir que hay poco motivo para resistirse a la fuerza de la naturaleza, señaló Loos. Añadió que, de hecho, un estudio reciente sobre los efectos de las pruebas genéticas mostró que cuando a las personas se les informaba que tenían una susceptibilidad genética mayor que la promedio a la obesidad, éstas aumentaban su ingesta dietética de grasa en los tres meses posteriores, lo que sugiere que la información genética podría haberles provocado una sensación de falta de control.

Pero ese fatalismo no está justificado, señaló, aunque se necesita más investigación para comprender el impacto de los genes y el ambiente sobre el peso.

El Dr. Robert Berkowitz, director médico principal del Programa del Peso y los Trastornos Alimentarios de la Universidad de Pensilvania, señaló que la epidemia estadounidense de obesidad de las últimas tres décadas no ha resultado de cambios en los genes, sino de cambios en los hábitos.

"Es bueno ver que la actividad física realmente puede ayudar a pesar de que las personas tengan un gen [de la obesidad]", añadió Berkowitz. "Realmente se trata de una interacción entre genes y ambiente. La mayoría tenemos trabajos sedentarios, así que no somos tan activos como hace treinta o cuarenta años. Creo que todo esto dificulta que una persona se enfrente a un problema de peso".

FUENTES: Ruth Loos, Ph.D., group leader, Genetic Aetiology of Obesity Programme, Addenbrooke's Hospital, Cambridge, England; Robert Berkowitz, M.D., senior medical director, Weight and Eating Disorders Program, and associate professor, psychiatry and pediatrics, Perelman School of Medicine, University of Pennsylvania; Nov. 1, 2011, PLoS Medicine

lunes, 31 de octubre de 2011

"Comer insectos hace bien"

Una notable fuente de alimentacion
El sabor de los insectos
Un sabroso chupetín de grillo, un nutritivo plato de arañas fritas a la camboyana...

Página 12

Por Raúl A. Alzogaray

Un capítulo de la serie documental China Salvaje muestra a dos hombres en medio de la selva. Uno de ellos sostiene en alto una rama con un saltamontes ensartado en la punta. De pronto, un avispón se posa sobre el saltamontes y se pone a mordisquearlo. Entonces el hombre baja lentamente la rama hasta apoyarla en el suelo.

El segundo hombre tiene en la mano un hilo con un plumón blanco en un extremo y un lazo con un nudo corredizo en el otro. Con mucho cuidado, pasa el lazo alrededor de la cintura del avispón y ajusta el nudo corredizo.

Al rato, el avispón levanta vuelo y se aleja entre las copas de los árboles. Los hombres lo siguen, abriéndose paso entre la vegetación. Apenas distinguen al insecto, pero ven con claridad el plumón blanco que cuelga de su cintura. De esta manera, el avispón conduce a sus perseguidores hasta el avispero que cuelga de la rama de un árbol.

Cuando llegan al lugar, uno de los hombres enciende una antorcha y la acerca al avispero. Alterados por el humo, los avispones se alejan. Antes de que vuelvan, el hombre agarra el avispero y lo rompe, dejando al descubierto un montón de larvas blancas y regordetas. Sentados en el suelo, entre risas, los dos hombres comen las larvas con evidente placer. La voz en off del relator dice que los habitantes de esa región de China “consideran un manjar estas larvas engordadas”.

Uno de los primeros registros históricos del consumo de insectos es un bajorrelieve asirio de hace 2700 años, que muestra a unos sirvientes transportando langostas ensartadas en broquetas durante una fiesta. Los antiguos griegos cocinaban pasteles de saltamontes, y en su libro Historia de los animales, Aristóteles señaló que las cigarras más sabrosas son las de mayor tamaño y las hembras embarazadas (que llevan deliciosos huevos dentro del abdomen). Entre los antiguos romanos, las orugas de cossus, un insecto que no se ha podido identificar, eran un manjar que disfrutaban después de alimentarlas con harina.

A lo largo de la historia, los miembros de la realeza también disfrutaron el sabor de los insectos. Al emperador Moctezuma le gustaba desayunar los huevos frescos de cierta chinche acuática. Este insecto vivía en un lago ubicado a varios kilómetros de la capital azteca, así que cada mañana, un sirviente corría esa distancia para que los huevos estuvieran a tiempo en la mesa de su amo. El plato preferido del emperador Hirohito era arroz mezclado con unas avispas tostadas que todavía se consiguen en los supermercados japoneses.

Hasta las religiones se ocuparon del tema: el libro Levítico del Antiguo Testamento y las reglas de alimentación de los musulmanes autorizan el consumo de langostas.

SI TE COMES MIS CULTIVOS, TE COMO

Según pasaron los años, el gusto de los occidentales por los insectos se convirtió en un fuerte rechazo de origen incierto. Pero comer insectos sigue siendo cosa de todos los días en los países tropicales y subtropicales. Se han identificado más de 1600 especies de insectos comestibles, usados como alimento por 3000 grupos étnicos en 113 países. El mayor consumo se registra en América (679 especies en 23 países) y Africa (524 especies en 36 países). Los europeos son los más reacios a llevar insectos a la mesa (41 especies en 11 países).

Los insectos más consumidos son los escarabajos y el grupo de las hormigas, abejas y avispas. El tercer lugar lo ocupa el grupo de los saltamontes, langostas, cucarachas y grillos, seguido de cerca por las mariposas y polillas. Con menor frecuencia, también van a parar a la olla distintas especies de termitas, chinches, moscas y libélulas.

Desde la antigüedad, las nubes de langostas han sido una plaga muy temida. Formadas por millones de insectos, cada uno capaz de comer diariamente unos dos gramos de materia vegetal, pueden arrasar los cultivos en un área de miles de kilómetros cuadrados. Los habitantes de algunas regiones de Africa y Medio Oriente se adaptaron al problema: si las langostas se comen los cultivos, la gente se come a las langostas. Cuando el gobierno aplica insecticidas, los granjeros se quejan porque los insectos intoxicados no son comestibles. En Corea, México, Tailandia y Filipinas, hay agricultores que en vez de aplicar insecticidas, prefieren recolectar la plaga y comérsela.

Las langostas y termitas, fritas, hervidas o tostadas, son muy populares en muchos países africanos. La República de Zaire produce 280 toneladas anuales de orugas secas para consumo humano. Unas orugas que los lugareños llaman mumpa, constituyen la principal fuente de proteínas en algunas regiones de Zambia. Estas orugas abundan en los bosques y la gente viaja cientos de kilómetros para capturarlas. Después las venden en sus ciudades de origen. Los funcionarios forestales están preocupados por el daño que los cazadores de insectos le producen a la vegetación.

Para los habitantes del sudeste asiático, los insectos son un componente importante de la dieta cotidiana. Los vendedores callejeros de Tailandia ofrecen grandes bandejas repletas de chinches de agua, generalmente fritas, que la gente compra y come con total naturalidad. Las langostas que los granjeros recolectan en sus campos generan un mercado de seis millones de dólares anuales. Los tailandeses llegan a comer entre 20 y 60 gramos de insectos por día.

En el noreste de la India, 40.000 familias viven del cultivo de ricino y la cría de polillas. De las semillas del ricino extraen un aceite que tiene aplicaciones medicinales e industriales. Con las hojas de las plantas alimentan a las larvas de las polillas. Cuando las polillas crecen, se rodean de un capullo de seda y se preparan para transformarse en polillas adultas. Los criadores desarman el capullo para extraer la seda. También venden las larvas, que los habitantes de la región consideran un bocado delicioso.

HAY UN GRILLO EN MI CHUPETIN

En Estados Unidos, una empresa californiana fabrica chupetines que contienen grillos enteros. Las golosinas son traslúcidas, de modo que se puede distinguir claramente las siluetas de los insectos. Vienen con gusto a naranja, uva, fresa o arándano, y se pueden comprar en forma individual o en cajas de 36 unidades. La misma empresa produce obleas de chocolate decoradas con hormigas. Estos artículos están aprobados por la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA), agencia que regula los productos destinados a la salud y la alimentación humanas.

La posibilidad de que alguien se comiera un insecto llegó a generar las críticas de una sociedad protectora de animales. En septiembre de 2006, la cadena estadounidense de parques de diversiones Seis Banderas anunció que premiaría con entradas gratis para todas sus atracciones a las personas que se comieran una cucaracha de Madagascar viva (insecto que mide hasta ocho centímetros de largo). La empresa ofreció un premio especial para quien rompiera el record de Ken Edwards, un inglés que en marzo de 2001 se comió treinta y seis cucarachas de Madagascar en un minuto.

La iniciativa provocó reacciones encontradas. La empresa recibió quejas del público, porque la promoción no se realizaba en todos los parques de la cadena. También surgieron defensores de las cucarachas. La organización Personas por la Etica en el Trato de los Animales (PETA) transmitió las protestas de niños, adultos e incluso empleados de Seis Banderas, que llamaban para oponerse al concurso. “Los insectos no merecen que se los coman vivos, y mucho menos como parte de un truco publicitario”, declaró una portavoz de la PETA.

Mucha gente siente repulsión ante la sola idea de llevarse un bicho a la boca, pero la verdad es que todo el mundo come insectos (aunque la gran mayoría ni se lo imagina). Hasta la FDA reconoce que aun con las más modernas tecnologías, es imposible elaborar alimentos totalmente libres de fragmentos de insectos, pelos de roedores y excreciones de animales. La única manera de evitarlos por completo sería dejar de comer.

Pero como todo tiene un límite, la FDA declaró aceptable que haya hasta 59 fragmentos de insectos cada 100 gramos de chocolate; hasta nueve huevos de moscas cada 500 gramos de tomates en lata; una larva de mariposa cada 454 gramos de maíz dulce enlatado o hasta 59 ácaros cada 100 gramos de brócoli congelado (se supone que en ningún producto elaborado con buenas prácticas de manufactura se deberían alcanzar estos valores).

Las razones que llevaron a la imposición de estos límites no son sanitarias, porque los fragmentos de insectos en los alimentos no representan un problema para la salud (excepto para las personas alérgicas). Se trata, en cambio, de una cuestión estética. La FDA cree que abrir un paquete de medio kilo de harina de trigo y encontrar más de 740 fragmentos de insectos es una ofensa para los sentidos de los consumidores. Incluso en Laos, donde el noventa por ciento de la población come insectos, la gente reconoce que no le gusta encontrar fragmentos de estas criaturas en los productos alimenticios convencionales.

SOPA DE SALTAMONTES Y GUISO DE TERMITAS

Para crecer y mantenerse saludable, el cuerpo humano necesita un aporte constante de proteínas, ácidos grasos, vitaminas y minerales. Todas estas sustancias están presentes en los insectos. Si al cuerpo de un insecto se le extrae completamente el agua, más de la mitad de lo que queda son proteínas y una buena parte del resto son ácidos grasos. La mayoría de los insectos comestibles tiene importantes cantidades de sodio, calcio, hierro y magnesio. Las abejas jóvenes son ricas en vitaminas A y D, y hay larvas de mariposas con altos contenidos de vitaminas B1, B2 y B6. El estudio de 94 especies de insectos mexicanos comestibles reveló que la mitad tiene más calorías que los porotos de soja; el 63 por ciento es más calórico que la carne de vaca, y el 70 por ciento supera las calorías de las lentejas y el pescado.

Para los interesados en experimentos culinarios, varios libros de cocina ofrecen recetas con insectos. Uno de ellos, titulado Cómase un bicho, presenta “33 maneras de cocinar saltamontes, hormigas, chinches acuáticas, arañas, ciempiés y sus parientes”. Escrito por David Gordon y publicado en California en 1998, este libro da instrucciones para preparar sopa crema de saltamontes, guiso de termita al curry, orugas con tomates verdes fritos y gusano de seda agridulce, entre otros platos. También incluye una lista de proveedores de insectos comestibles (todos en Estados Unidos). No existe traducción al español, pero se puede comprar por Internet.

Los expertos que estudian el tema opinan que los insectos podrían ser en el futuro una importante fuente de proteínas para los seres humanos (en algunas partes del mundo ya lo son). También se contempla la posibilidad de usarlos como alimento para gallinas y peces.

La cría masiva de insectos tiene varias ventajas sobre la ganadería y la agricultura. Requiere menos espacio y no necesita fertilizantes ni plaguicidas, cuyo mal uso está causando tantos problemas en el mundo. Además, hay insectos que transforman su alimento en proteínas con más eficiencia que una vaca o un cerdo.

Las costumbres bien establecidas no cambian de un día para otro. Quizás los insectos nunca formen parte de la canasta familiar en los países occidentales. Pero quién sabe. Tiempo atrás hubo en Argentina una campaña publicitaria cuyo eslogan era “coma manzana”. ¿Llegará el día en que se recomiende comer escarabajos y hormigas?


"El poder de la belleza"

| El poder de la belleza
Cómo el maquillaje hace que una mujer se vea más "competente"
¿Es posible manipular la primera impresión acerca de uno?

La Nación

Investigadores evaluaron el efecto que tiene sobre el juicio acerca del desempeño

Por Catherine Saint Louis | The New York Times

NUEVA YORK.- ¿Desea más respeto, confianza y afecto por parte de sus compañeros de trabajo? Usar maquillaje aparentemente puede ayudar. Aumenta la percepción que la gente tiene de la simpatía de una mujer, de su capacidad y (con tal que no exagere) de su confiabilidad, afirma un reciente estudio. Todo esto confirma lo que es obvio: que los cosméticos acentúan la atracción de una mujer.

Desde hace mucho, se sabe que los rostros simétricos son considerados más atractivos y que la gente supone que las personas apuestas son inteligentes y buenas. Hay también alguna evidencia de que las mujeres se sienten más seguras cuando usan maquillaje, una especie de efecto placebo, afirmó Nancy Etcoff, principal autora del estudio y profesora de psicología clínica de la Universidad de Harvard. Pero hasta ahora ningún estudio había destacado que el maquillaje pudiera hacer que la gente dedujera que una mujer bien maquillada fuera capaz, confiable y amable.

El estudio fue financiado por Procter & Gamble -que posee líneas de maquillaje-, pero investigadores como Etcoff y otros de la Universidad de Boston y del Instituto del Cáncer Dana-Faber fueron los responsables de su diseño y ejecución.

Las 25 mujeres del estudio, de entre 20 y 50 años, blancas, afroamericanas e hispanas, fueron fotografiadas sin ningún cosmético y con tres maquillajes diferentes que los investigadores llamaron natural, profesional y glamoroso. Ciento cuarenta y nueve adultos juzgaron cada una de las fotos durante 250 milésimas de segundo, tiempo suficiente para realizar un juicio rápido. Luego, 119 adultos tuvieron un tiempo ilimitado para observar las mismas caras.

Los participantes juzgaron a las mujeres maquilladas con varias intensidades de contraste lumínico (palabras que expresan cuánto se destacan los labios y los ojos comparados con la piel) como más aceptables que las no maquilladas.

"Estoy un poco sorprendido de que esta relación se aplique, incluso, a la apariencia muy glamorosa", afirmó Richard Russell, profesor de psicología del Gettysburg College. "Si traigo a mi mente una mujer altamente competente, digamos, Hillary Clinton, no pienso en mucho maquillaje. Pero ella está a menudo en escena, así que, según lo que sé, se debe maquillar mucho."

El doble filo del glamour

Pero en el aspecto glamoroso no todas son rosas. "Si uno utiliza una apariencia glamorosa, debería saber que se ve muy atractiva" a primera vista, aseguró Etcoff, autora de La supervivencia de las más lindas, en el que sostuvo que buscar la belleza es tanto un imperativo biológico como cultural. Así como el atuendo para asistir a una reunión de trabajo es diferente del que uno se pondría para ir a un nightclub, así, se puede elegir el maquillaje estratégicamente de acuerdo con la agenda.

"Hay veces en que uno quiere dar una impresión poderosa de: «Yo soy la que manda acá», y las mujeres no deberían temer eso", y usar un color de labios más profundo que podría verse brilloso y aumentar la luminosidad, dijo Sarah Vickery, otra de las autoras del estudio y científica de Procter & Gamble. "Otras veces, uno quiere dar un mensaje más equilibrado, de mayor colaboración."

En ese caso, sugirió optar por tonos de labios que sean de claros a moderados en la saturación del color, dando contraste a la piel facial, pero que no sean brillosos.

Algunas mujeres no consideraron los hallazgos del estudio como un progreso. "No utilizo maquillaje ni quiero pasarme 20 minutos aplicándolo", comentó Deborah Rhode, profesora de derecho de la Universidad de Stanford, que escribió La parcialidad de la belleza, en el que se detalla cómo la apariencia afecta injustificadamente a algunas trabajadoras. "La calidad de mi enseñanza no debería depender del color de mi lápiz de labios o de si uso o no máscara para las pestañas."

Aseguró que no está en contra de la belleza, pero sí "contra nuestra preocupación y contra cómo los juicios sobre la atracción se convierten en sentencias sobre la competencia y el rendimiento laboral".

Etcoff sostuvo que ha habido un cambio de ideas sobre el arreglo personal que incluye al maquillaje. "Hace 20 o 30 años si uno se arreglaba, era simplemente para agradar a los hombres o era algo que se hacía porque la sociedad lo exigía. Hoy las mujeres y feministas ven esto como una elección personal y que puede ser una herramienta efectiva."

Vickery agregó que los cosméticos pueden cambiar significativamente la forma en que la gente lo ve a uno, hacer que la gente piense que uno es elegante o cálido y accesible en una primera impresión. Y agregó que la apariencia está bajo el control de cada mujer, mientras que hay tantas otras cosas que uno no puede controlar.

Daniel Hammermesh, profesor de economía de la Universidad de Texas, opinó que la conclusión de que las mujeres maquilladas son más simpáticas o socialmente más cooperativas tiene sentido porque "relacionamos el aspecto y el deseo de cuidarse con el de cuidar a los demás".

Hammermesh, autor de La belleza rinde, aseguró que desearía que la gente bien parecida no fuera tratada de manera diferente, pero, agregó, él es realista. "Como cualquier otra cosa que la sociedad premia, la gente tomará ventaja de ello", dijo del maquillaje. "Sería un mundo más justo si la belleza no fuera recompensada pero, lo es."

Traducción de María Elena Rey .

viernes, 14 de octubre de 2011

"Alerta dietas famosas son peligrosas"

Las 15 dietas famosas que tienen riesgos para la salud
Un organismo oficial francés analizó las más populares en Internet y en las ventas de libros. Y las cuestionó seriamente.

Clarin.com

Fotos de chicas flaquísimas, supuestamente lindas. Publicidades donde la gente feliz no tiene un gramo de más. Las referencias de la cultura del consumo a un supuesto modelo corporal son las madres del problema que, ahora, parece ser mayor de lo que se creía. Según lo plantea en un estudio la Agencia de Seguridad Sanitaria, Alimentación, Medio Ambiente y Trabajo del gobierno francés, muchos regímenes adelgazantes no sólo no son una buena alternativa para bajar de peso sino que conllevan riesgos para la salud. Básicamente, dice que las dietas más populares no son equilibradas en términos alimentarios y que en un 95% provocan un aumento de peso cuando se las deja , ya sean las ricas en proteínas o pobres en glúcidos.

La agencia analizó en profundidad las 15 dietas más populares en Internet y venta de libros, entre ellas la Atkins, la californiana, la desintoxicante del limón, la de crononutrición, la Mayo y el régimen de la sopa de repollo. Su informe de 160 páginas, publicado la semana pasada, evalúa los desequilibrios importantes que traen aparejadas en macro nutrientes (lípidos, glúcidos, proteínas), en vitaminas y en minerales, y que afectan en los niveles óseo, metabólico, cardiovascular, hepático, renal, digestivo y psicológico (ver Las consecuencias...).

En más del 80% de estas dietas, los aportes en proteínas son superiores a los valores nutricionales aconsejados, e incluso muy elevados, como en el caso de la Dukan, que constituyen además su señal distintiva. Varias de ellas (en especial, la De la Zona, la Crononutrición y la Atkins) proponen aportes de grasas superiores a los niveles máximos recomendados. En tres de cada cuatro dietas, los aportes en fibras son inferiores a lo aconsejable, e incluso en algunos casos cerca de diez veces menores, como en las dos primeras fases de la Dukan.

El presidente del grupo de trabajo de la ANSES que llevó adelante la investigación, Jean Michel Lecerf, dijo que estas dietas “contienen pocas fibras, vitaminas y minerales, y demasiada sal”. Lo que, según él, hace que “personas que no tenían problemas de peso puedan pasar a estar en sobrepeso y desarrollar perturbaciones del comportamiento alimentario”.

En el caso concreto de las mujeres –de las que, de acuerdo con el informe, el 40% se considera “demasiado gorda” y el 60% desea pesar menos– los aportes en hierro recomendados rara vez son respetados . Varios regímenes (el Mayo, el Montignac, el Fricker) no cubren las necesidades en calcio, mientras que en dos de las fases de la Dukan los aportes son dos veces superiores a lo recomendado. La primera etapa de esta dieta aporta más de dos veces el máximo de sodio aconsejado. El aporte en vitamina C es muchas veces demasiado débil, en especial en las Dukan y Fricker, al igual que el de vitamina D, salvo para los regímenes Dukan fase 2 y 3, en donde es cuatro veces más elevado que lo recomendado.

Según Marcela Leal, directora de la carrera Nutrición de la Universidad Maimónides, la mayoría de las dietas actuales tienen que ver con una restricción alimentaria importante en nutrientes y con el consumo excesivo de otros. “Las dietas de moda no son soluciones a largo plazo si se desea bajar de peso. Muchas dan resultados en su comienzo, provocando un descenso de peso brusco. Sin embargo, pueden ocasionar graves consecuencias en el organismo . Prometen resultados no realistas, son difíciles de mantener en el tiempo y no son saludables”, explica la especialista.

Para Ana Jufe, nutricionista del Hospital de Clínicas, el problema no es tanto la dieta sino cómo se hace. “Es una herramienta que el paciente debe usar acompañado por un médico, por eso el problema es que se la haga por su cuenta y por tiempos indefinidos”. Leal coincide: “Intentar un descenso de peso sin asesoramiento profesional lleva a prácticas alimentarias desequilibradas”.

Para cerrar, Jufe deja una pregunta que bien podría abrir un debate más profundo: “Sería bueno también cuestionarnos por qué fabricamos cada vez más alimentos no nutritivos y potencialmente adictivos, generalmente económicos, que predisponen en gran medida a esta severa enfermedad”.


Paradojas de las dietas extremas
Por Mónica Katz Nutricionista

Paradoja 1: en general buscan tratamiento consumidores sin exceso de peso ni riesgo, pero con sobrepeso cultural. Los obesos con patologías asociadas y alto riesgo, muchas veces ni siquiera piensan en un tratamiento.

Paradoja 2: las estrategias para perder peso en términos de alimentación se basan en reducir calorías y manipular la composición de la dieta (porcentaje de macronutrientes: hidratos, proteínas y grasas). Si bien es necesario que la persona coma menos, se utilizan dietas extremadamente bajas en calorías sin necesidad. ¿Para qué dar dietas de hambre si reduciendo 500cal/día, en 10 días se perderá 1 kilo?

Paradoja 3: el hambre oculta y la malnutrición de los que pueden comer. El déficit de vitaminas y minerales que nadie sospecha ni trata. En nuestro país la carencia de calcio y hierro constituyen ya un desafío sanitario. La baja ingesta de frutas y verduras se repite en diferentes estudios.

Paradoja 4: quizás la más dramática es la paradoja profesional. La cultura delinea su ideal estético. Las personas luego buscan dietas pintorescas, resultados rápidos y expectativas irreales. Las dietas heterodoxas no poseen evidencia científica. Sin embargo poseen demasiado espacio en los medios y son difundidas por famosos que se constituyen en modelos de comportamiento. Sin cuestionamientos, el respectivo gurú las transforma en meta-religión con muchos fieles seguidores.

¿Es acaso una opción terapéutica la delgadez a cualquier costo? ¿Es razonable excluir y demonizar alimentos? Es licito convertir el acto de comer en un ilícito? ¿Es ético embarcarse en un viaje hacia la desnutrición, el estrés del hambre, el rebote de peso y el trastorno alimentario? ¿Será que los kilos en la balanza son la dosis de certeza necesaria frente a la incertidumbre cotidiana? Será que así de vulnerables, las dietas por más heterodoxas, sean la errada manera de afrontarla?